García Aresca habilitó obras de refacciones del dispensario de barrio Cottolengo

Acompañado por los secretarios de Salud, Fernando Giacomino; de Gobierno, Gustavo Piscitello y de Desarrollo Económico, Social y Educativo, Marcelo Moreno; el intendente Ignacio García Aresca recorrió las refacciones concretadas en el dispensario de barrio Cottolengo.

“Estamos visitando las reformas que se han hecho en este dispensario ya que una de las frases de nuestro intendente es `menos discursos y más realidades´, esta es una muestra de ello dado que nuestro objetivo es que los vecinos que asisten a este lugar se sientan cómodos y estén bien atendidos, igual o mejor que en el sector privado”, expresó el secretario Fernando Giacomino.

Esta misma tarea de arreglos y reformas se llevan a cabo en los distintos CAPS (Centros de Atención Primaria de Salud)  y en la Asistencia Pública. Los trabajos estuvieron a cargo de personal municipal y con recursos municipales. 
Cabe mencionar que la ciudad de San Francisco cuenta con la Asistencia Pública y con 9 dispensarios administrados por la municipalidad, los cuales están ubicados en los barrios Dos Hermanos, Sarmiento, Bouchard, La Milka, Roque Sáenz Peña, Parque, Cottolengo, Jardín y San Cayetano.

El titular de Salud municipal agregó que “las mejoras incluyen reformas edilicias, en los mobiliarios, sillones de odontología y pintura, pero también hay que decir que contamos con excelentes profesionales como médicos clínicos, pediatras, odontólogos, ginecólogos y enfermeros. Queremos que en los dispensarios se atienda apropiadamente a los vecinos y que se le brinde el espacio y la contención adecuada, resolviendo el problema que los aqueje”.

Por su parte, el intendente García Aresca dijo: “Uno de los ejes fundamentales que tenemos como gobierno municipal es la salud, por ello contamos con un muy buen equipo de profesionales y personal que trabajan por y para los vecinos. El dispensario tiene como finalidad brindar la mejor atención posible a los vecinos de cada sector y por ello deben contar con las comodidades suficientes y con los instrumentos necesarios. En ese sentido seguiremos trabajando porque sabemos que la salud pública es esencial para el crecimiento de una ciudad”.

Por último Silvia Roldán, trabajadora del dispensario de barrio Cottolengo, opinó acerca de las reformas: “Estamos muy agradecidas al intendente y al secretario de Salud ya que tenemos los elementos necesarios para trabajar, lo que nos predispone mejor a la hora de cumplir nuestra tarea. La gente nota esos cambios y nos lo comentan, así que nosotras también estamos contentas de que eso ocurra”.